Un vecino de Sangonera la Seca, en Murcia, denuncia haber sido víctima de ataques homófobos y amenazas por parte de sus vecinos, quienes, según él, lo acosan debido a una deuda comunitaria.

‘Maricones fuera’. Esa fue la frase que apareció escrita en la fachada de su vivienda, tal y como relató Jaime, residente de la localidad. El hombre asegura estar siendo objeto de «presiones y amenazas» por parte de algunos vecinos debido a un impago de 3.000 euros a la comunidad de propietarios, una cantidad que actualmente no puede abonar.

«Antes solo recibía insultos y amenazas dirigidos a mí, pero nunca hacia mi orientación sexual», explicó el denunciante en la declaración que presentó ante la Guardia Civil en el cuartel de Las Torres de Cotillas.

Según Jaime, de 45 años, el 18 de abril por la tarde, uno de los vecinos lo acusó de haber destrozado unos focos, argumentando incluso que poseía imágenes como prueba. No obstante, Jaime negó las acusaciones señalando que, tras haberse sometido a una operación en la pierna, su movilidad estaba limitada, lo que le impedía realizar tales acciones.

Al día siguiente, mientras se disponía a llevar a su hija al colegio, encontró pintadas ofensivas en las paredes exteriores de su vivienda. En la puerta corredera del garaje se leía ‘Maricones’, en otro lado ‘Fuera’ y en otra pared nuevamente la palabra ‘maricones’, acompañada de un dibujo ofensivo.

Jawad Romaili, abogado que representa a Jaime, señaló a La Opinión que «mi cliente fue víctima de pintadas homófobas que ya han sido denunciadas, aunque se ampliará la denuncia porque días después se halló un animal muerto en su porche». Se trataba de un conejo.

«Este acto parece estar destinado a seguir dañando su integridad, generando temor no solo a él, sino también a su hija menor, causando un impacto emocional y psicológico», añadió el letrado. Posteriormente, se encontró un segundo conejo muerto en la misma ubicación.

Romaili destacó que estas acciones constituyen «un intento claro de intimidación y una muestra de odio que no debe ser tolerada». Asimismo, subrayó que se ha interpuesto una denuncia formal y confía en que las autoridades realizarán una investigación exhaustiva para identificar a los responsables de estos actos.

El abogado enfatizó que es esencial «hacer justicia y garantizar que los derechos de todas las personas sean respetados, sin importar su orientación sexual, creencias u origen». Subrayó que su equipo legal trabajará para que los responsables enfrenten las consecuencias legales correspondientes.

«No solo estamos hablando de un caso individual de discriminación», dijo Romaili, «sino de un reflejo preocupante de la persistencia de conductas discriminatorias en nuestra sociedad».

Por último, el abogado hizo un llamado a la unidad para erradicar cualquier tipo de discriminación, recordando que «la diversidad es un pilar esencial para construir una sociedad justa y equitativa». Añadió que «todos tenemos la responsabilidad de garantizar que nadie sea objeto de odio por ninguna razón».

Romaili concluyó señalando que su prioridad es buscar justicia para Jaime y su hija, al tiempo que recordó que existen vías legales para resolver los conflictos sin recurrir a este tipo de conductas inaceptables.